Escarlate Letra A: John Everett Millais

Poema da Bipolaridade

Ontem, eu havia decidido dispensar
os 1.202.832 rostos reproduzidos
da mesma face no espelho
da Terra do Nunca.

Hoje, não sei.

Ontem, eu estendia a mão
para as nuvens tocando, frias,
os dedos ainda mais frios
das urzes da Terra da Lua.

Hoje, sinto como Ritsos sentia
a mão no bolso penugento
do furo por onde escapou
a única moeda de ouro
do Príncipe dos Lírios.

Ontem, era o "não" hesitante,
hoje é o sim que diz "talvez não"
ao tempo que escorre como areia
por entre as unhas de louça da boneca
de vestido profundamente vermelho
como rubra é a coragem do emblema.

*Fernando Monteiro*

(23/06/2011)

La niña de Guatemala

(José Martí)

Quiero, a la sombra de un ala,
contar este cuento en flor:
la niña de Guatemala,
la que se murió de amor.

Eran de lirios los ramos;
y las orlas de reseda
y de jazmín; la enterramos
en una caja de seda...

Ella dio al desmemoriado
una almohadilla de olor;
él volvió, volvió casado;
ella se murió de amor.

Iban cargándola en andas
obispos y embajadores;
detrás iba el pueblo en tandas,
todo cargado de flores...

Ella, por volverlo a ver,
salió a verlo al mirador;
él volvió con su mujer,
ella se murió de amor.

Como de bronce candente,
al beso de despedida,
era su frente -¡ la frente
que más he amado en mi vida!...

Se entró de tarde en el río,
la sacó muerta el doctor;
dicen que murió de frío,
yo sé que murió de amor.

Allí, en la bóveda helada,
la pusieron en dos bancos:
besé su mano afilada,
besé sus zapatos blancos.

Callado, al oscurecer,
me llamó el enterrador;
nunca más he vuelto a ver
a la que murió de amor.

Verde que te quiero verde.
Verde viento. Verdes ramas.
El barco sobre la mar
y el caballo en la montaña.
Con la sombra en la cintura
ella sueña en su baranda,
verde carne, pelo verde,
con ojos de fría plata.
Verde que te quiero verde.
Bajo la luna gitana,
las cosas la están mirando
y ella no puede mirarlas.
Verde que te quiero verde.
Grandes estrellas de escarcha
vienen con el pez de sombra
que abre el camino del alba.
[...]

Federico García Lorca

Poema dos Olhos da Amada

(Vinicius de Moraes)

Oh, minha amada

Que os olhos teus

São cais noturnos

Cheios de adeus

São docas mansas

Trilhando luzes

Que brilham longe

Longe nos breus...

Oh minha amada

Que olhos os teus

Quanto mistério

Nos olhos teus

Quantos saveiros

Quantos navios

Quantos naufrágios

Nos olhos teus...

Oh minha amada

Que olhos os teus

Se Deus houvera

Fizera-os Deus

Pois não os fizera

Quem não soubera

Que há muitas eras

Nos olhos teus...

Ah, minha amada

De olhos ateus

Cria a esperança

Nos olhos meus

De verem um dia

O olhar mendigo

Da poesia

Nos olhos teus.

Escarlate Letra A

domingo, 12 de junho de 2011

John Everett Millais

Nenhum comentário:

Postar um comentário